Los desatinos de Filipe Luis Y Godin ayudan al Barça

Magnífico partido del Atlético de Madrid cuando tuvo once jugadores y hasta cuando hubo de jugar con dos menos durante mucho tiempo. Las expulsiones de Luis Filipe y de Godin en momentos claves del encuentro no sólo estroperaron el espectáculo sino que facilitaron la victoria de un Bacerlona muy pobre de juego y temeroso del rival. Más que temeroso asustado en todos los sentidos. Nada que objetar a las decisiones tomadas por Undiano Mallenco en el aspecto disciplinario.

Durante veinticinco minutos de la primera parte el Atlético de Madrid fue dueño y señor del partido gracias a la labor de su medio campo. Compuesto de izquierda a derecha por Koke (autor del gol de su equipo), Augusto, Gabi y Saúl. Ayudados por el buen trabajo de Carrasco y Griezman. Ambos tan combativos  a la hora de defender como peligrosos atacantes. Detrás se mostraban firmes Godin, Jímenez, Juanfran y Luis Filipe. El gol de Koke, tras gran jugada de Saúl, era el premio que merecía el equipo colchonero.  

El Barcelona, mientras tanto, se veía atenazado por sus rivales que presionaban arriba y que, en cuanto el balón rebasaba a sus delanteros, allá que se replegaban todos para evitar que Messi  Suárez y Neymar tuvieran  posibilidades de enlazar con Iniesta Busquets y Rakitic. Los jugadores del Atlético parecían gamos. Pero no había indicios de que pudieran hundirse físicamente.

Eso sí, los del Cholo decidieron tomarse un respiro de cinco minutos antes de cumplirse la media hora de partido y ¡zas!, Messi le puso la guinda a una jugada de Alba. Inmediatamente, Suárez marcó el segundo. Y a renglón seguido Luis Filipe perdió la cabeza y fue a pagarla con el astro argentino. Entrada de bruto que le costó la expulsión.

La cara de Simeone en el banquillo reflejaba el inaudito revés que había sufrido su equipo en un abrir y cerrar de ojos. Porque hasta esos minutos desastrosos su equipo había jugado de dulce y se había hecho merecedor de llegar, al menos, empatado al descanso. A partir de ese momento, y por mucho y bien que estuviera jugando Carrasco y todos los componentes del medio campo atlético, yo no daba ya un duro por los rojiblanco. Y me equivoqué.

Salió el Atlético sin Gabi y situando a Gámez en el lado del alocado Luis Filipe. Y pasó de un 4-4-2 a un 4-4-1. Y otra vez los visitantes  se hicieron dueños de la situación estando como estaban en inferioridad manifiesta ante el que dicen que es el mejor equipo del mundo. Incluso Bravo, aliado con la Diosa Fortuna, evitó el empate de Griezman.


Hubo momentos en los que los aficionados azulgrana comenzaron a mostrar su enfado porque sus futbolistas eran incapaces de imponerse en ninguna zona del campo. Hasta el punto de que se veía llegar el segundo gol de los inquilinos del Manzanares. Pero en el minuto diecinueve, más o menos, a Godin también se le cruzaron los claves y de ello se aprovechó su paisano Suárez que hizo aspavientos de herido grave. La correspondiente expulsión parecía dejar al Atlético a merced del Barça. Y no fue así. Es más: aun tuvieron los atléticos otra oportunidad de gol.

Ganó el Barcelona y su triunfo le sirve para casi asegurarse la Liga. Y al derrotado Atlético para hacernos ver que su mal partido frente al Celta en la Copa del Rey no le ha afectado lo más mínimo. Y hasta tengo la certeza de que el equipo rojiblanco será un adversario terrible en la Champións League.