Opiniones futbolísticas

Isco Alarcón es jugador de periodistas

El Madrid había goleado al Deportivo jugando un magnífico partido. Zidane llega a la sala de prensa conteniendo la alegría del momento. La cual le dura nada y menos. Debido a que hay un periodista a quien sólo le interesa saber la razón por la cual no ha jugado Isco. Y su pregunta le sale preñada de malas intenciones. El entrenador del Madrid, que también tiene sangre en las venas, le responde más subido de tono que en otras ocasiones. Isco es un jugador importantísimo. Pero quien tiene que decidir quienes juegan soy yo. El caso del jugador malagueño se ha convertido en un asunto tedioso.

Marco Asensio como delantero centro flotante

Viendo ayer a Borja Mayoral actuando como delantero centro, además de acordarme de Mariano, jugador que está triunfando en el Olympique de Lyon, y del que dijo Valdano -en su momento- que sólo era combativo y goleador, con el fin de seguir defendiendo las cualidades de un Benzema tan venido a menos desde hace un tiempo, me vino a la memoria por qué nadie ha pensado en lo bien que le vendría al Madrid, en muchas ocasiones, situar al jugador mallorquín en esa labor de delantero centro flotante o falso, como ustedes deseen, teniendo por delante a Bale y Cristiano. Con desmarques hacia dentro y hacia fuera. Di Stéfano y Grosso cumplían ese cometido.

El ejemplo de Nacho

Jugador incapaz de levantar la voz cuando no juega y que siempre está en las mejores condiciones cuando el técnico lo necesita. Futbolista extraordinario. Y lo es porque además de conocer el oficio es mesurado, sobrio y templado en el césped. Lo cual le permite poner al servicio de su equipo lo que mejor sabe hacer, amén de evitar en la medida que le es posible que sus carencias se manifiesten. Su polivalencia viene a ser el epítome de todo lo dicho acerca de tan extraordinario profesional. Cualquier demarcación que le sea asignada la asume con el sosiego suficiente, el entusiasmo debido, y poniendo a contribución sus cualidades. Que no son pocas.

Adán

El portero del Betis tuvo la mala suerte de coincidir en el Madrid con Iker Casillas. Cierto es que tuvo su oportunidad pero no supo aprovecharla. Por más que él se empeñe en seguir culpando a José Mourinho de sus desgracias en el equipo merengue. Adán, sin embargo, ha logrado destacar sobremanera en el equipo bético. No obstante, mentiría quien dijera que está capacitado para jugar con los pies con la destreza mostrada por otros porteros cuando le presionan los rivales. Quique Setien, en cambio, sigue instándole a que lo haga. Mucho me temo que las dudas que le están generando el juego con los pies influya negativamente en él. Hay obcecaciones incomprensibles.

Lionel Messi

A veces me pregunto cómo es posible que la Selección Argentina no dé la talla teniendo entre sus filas a un futbolista de una categoría indecible. Ayer logró entusiasmar con su juego a todo el Estadio Benito Villamarín. Tras observar detenidamente cuanto acontecía en la primera parte, Messi decidió acelerar en la segunda. Y lo hizo a lo grande. Cierto es que su comportamiento no debió sorprender al equipo entrenado por Quique Setién. Puesto que era de esperar que algo así sucediera. Aunque aún sigo preguntándome lo siguiente: ¿de qué manera hubiera podido el equipo verdiblanco cortar de raíz semejante exhibición de juego -bello y práctico- de la estrella argentina?