Blog de Manolo de la Torre


Entrenador de fútbol, ha ejercido la profesión 19 temporadas. Escritor en periódicos,
ha publicado una columna diaria, durante dos décadas, en tres periódicos ceutíes.

viernes, 13 de abril de 2018

Charla sobre fútbol con Emilio Lamorena

El jueves pasado me llamó Emilio Lamorena, amigo fetén, para interesarse por mi salud y de paso  nos enfrascamos en una charla relacionada con todo lo ocurrido en el Madrid-Juventus. Partido en el cual los errores cometidos por el equipo madridista fueron tantos como aciertos tuvieron los italianos.

El primer fallo -le dije a mi amigo- lo cometió Casemiro. Cuya pérdida de balón ante Douglas Costa propició la jugada que acabó en el primer gol obtenido por Mandzukic. A partir de ahí, el extremo brasileño fue un azote constante para un desafortunado Marcelo. Quien tampoco recibió las coberturas adecuadas por parte del escudo de la defensa merengue. Tal vez porque éste, después de su error garrafal, quedó obnubilado.

Incapacitado para pensar también lo estuvo Zidane durante casi todo el partido. Lo cual le impidió remediar la agobiante presión ejercida por los italianos a sus jugadores; un acoso interminable que iba horadando cada vez más la lucidez de los futbolistas locales. Lo criticable es que nadie se percató de que era Pjanic quien dirigía la operación de acoso y derribo contra el tiburón blanco, desde su posición de mediocentro, con suma facilidad. 

Emilio Lamorena, mi amigo fetén, tras haberme escuchacho atentamente, me recordó lo que yo le dije hace dos años: "Lo que mejor le va al Madrid es jugar con Lucas Vázquez y Marco Asensio". Y, además de explicarle los motivos, celebré su buena memoria. Fue entonces cuando Emilio decidió preguntarme sobre el rival que yo deseaba para el Madrid en semifinales. Y le respondí con celeridad: el Bayern de Múnich

-¿Por qué -inquirió él. 

En principio, porque tanto Roma como Liverpool están convencidos de que pueden con todo lo que les echen en estos momentos. Los romanos han aprendido frente al Barça que perderle el miedo al miedo es la mejor terapia para enfrentarse a rivales encopetados. Y decidieron ir a por los jugadores azulgrana con las armas apropiadas: mediante el incordio calculado, el atosigamiento, la presión constante... Y dado que cuentan  con hombres fornidos, hercúleos... Verbigracia: Dzeco, Schick, Manolas, Nainggolan... Todos ellos capaces de dominar a los defensas en el juego aéreo 

En lo concerniente al Liverpool, sólo me cabe decir que es equipo especializado en el contraataque. La velocidad prima entre sus delanteros y centrocampistas. Si acaso deja ver cierta flojedad en su defensa. Pero insisto: es un rival crecido y, naturalmente, está tan bien dirigido como el equipo romano.

-O sea, Manolo, que tú estás convencido de que los madridistas han de invocar a todos los santos habidos y por haber para que el sorteo empareje a su equipo con el Bayern de Múnich.

Sí, Emilio, sí; porque el juego del equipo entrenado por Jupp Heynckes es  previsible. Lo cual no quita para que elimine al Madrid y hasta termine ganando la final. Te explico: detrás no están dando muestras de seguridad: Boateng y Hummels sufren muchísimo. Kimmich, en cambio, sigue siendo un lateral con tendencia ofensiva. Y en el lado izquierdo tienen problemas.

Son fuertes, sin embargo, cuando en el centro del campo unen a Robben y a Ribbéry por las bandas -ambos como extremos antiguos y además jugando a pierna cambiada-. Por detrás de ellos aparecen James y Javi Martínez -éste como medio centro- Luego, como delanteros escalonados, se sitúan dos gigantes: Lewandowski y Müller. Dos artilleros indiscutibles.

Por cierto, frente al Madrid, seguramente estará disponible Arturo Vidal: hueso duro de roer. Aun así, querido Emilio, yo prefiero que el Madrid se enfrente al equipo entrenado por Jupp Heynckes. Ahora bien, mucho tendrá que mejorar para esos partidos la defensa del Madrid. Equipo que está pidiendo el fichaje de centrales a voz en grito.

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