Opiniones futbolísticas

Fue Jorge Valdano, y si me equivoco estoy dispuesto a rectificar, quien dijo de Mariano, cuando éste jugaba en el Madrid los escasos minutos que le concedía Zidane, que el delantero era, más o menos, un jugador entusiasmado siempre y que marcaba algunos goles. Dejando entrever que no era la mejor solución para disputarle el puesto a Benzema. Y como yo había visto el progreso de Mariano en el Castilla y el buen rendimiento que el jugador nacido en Premiá de Mar ofrecia, cada vez que actuaba con el primer equipo, decidí seguir sus actuaciones en el Lyon. Tal es así que, antes de que Lopetegui hiciera públicas sus peticiones de jugadores, a mí se me ocurrió recordar a Mariano como el delantero ideal para poner en un brete a sus rivales cuando los partidos se pusieran complicados. Conque su regreso al Madrid me parece un acierto. Sobre todo porque él sabe a lo que viene. Lo cual es sumamente importante.

Muchas han sido las veces, desde hace ya varias temporadas, que quien escribe ha manifestado la necesidad que tiene el Madrid de hacerse con los servicios de un central zurdo. Exponiendo, como no podía ser de otra manera, los motivos de semejante petición. A sabiendas de que muchos madridistas podrían tacharme de querer saber más que los técnicos del mejor equipo del mundo. Tampoco dudé a la hora de recordarles a los entrenadores del Madrid que estaban obligados a decir ¡basta ya! a la anarquía de Marcelo. Pues bien, Julen Lopetegui decidió dar ese paso en el partido contra el Girona. Que es la mejor forma de trasnmitirles a los componentes de la plantilla que se han acabado los privilegios. El entrenador del Madrid, según la prensa deportiva de tirada nacional, ha pedido un central zurdo con capacidad suficiente para ser lateral. Se han mencionado dos nombres: Marcos Alonso y Mario Hermoso. El primero, por haberlo visto jugar muchas veces en el Chelsea, sería el ideal. Aunque tampoco conviene omitir el progreso que viene experimentando el segundo en el Español.

Luka Modric. Tardará su tiempo en nacer alguien que sea capaz de dominar el mediocampo como lo viene haciendo el jugador croata. Dueño y señor en su equipo y en la selección de su país de la zona donde se forjan los triunfos y se cuecen los fracasos. Jugador capaz  de ocupar cualquier sitio de esa línea con misiones concretas aunque distintas. Pues lo mismo se desenvuelve por los costados que por el centro y hasta resulta un portento ocupando la posición de segundo delantero. De aparente constitución débil, Luka Modric está en posesión de una condición física inmejorable. La que unida a su enorme sapiencia futbolística, le permite jugar al más alto nivel en el mejor equipo del mundo. Su talento ha sido reconocido por la UEFA: siendo elegido el mejor centrocampista y mejor jugador del año. No cabe la menor duda de que el croata puede seguir acaparando premios en los próximos meses.