Los problemas defensivos del Madrid

El Madrid suele situarse en el campo bajo el sistema 4-3-3, salvo raras excepciones. Debido a que cuenta con extremos apropiados para desempeñar ese dibujo táctico. Y, desde luego, con un delantero centro que encaja perfectamente en esa formación. No obstante, Vinicius se distingue más por su calidad atacante que por su trabajo defensivo. Lo mismo le sucede a Rodrygo cuando juega. De modo que el centro del campo blanco sufre lo indecible cuando no tiene el balón. Aunque Benzema, como delantero flotante, se retrase en ocasiones para ayudar a sus centrocampistas.

Tampoco conviene echar en saco roto que Modric y Kroos, extraordinarios futbolistas, han ido sumando años y por tanto ya no son los mismos de otrora a la hora de correr hacia atrás. Lo que, en bastantes ocasiones, pone en evidencia al mediocentro que actúa como escudo de la defensa. El cual se ve solo ante el peligro más veces de las debidas. Y si no que se lo pregunten a Camavinga a Tchouamení o a Valverde cuando Ancelotti los ha situado en esa demarcación. Sí, ya sé que vuelvo a redoblar el tambor acerca de un problema que el italiano no ataja y que frente al Barcelona volvió a relucir con claridad.

Lo reseñado repercute asimismo negativamente en el rendimiento de los laterales. Y si a eso le sumamos el declive futbolístico de Carvajal y Nacho, la defensa del Madrid se resquebraja cada dos por tres. Fragilidad que va minando la confianza de Courtois. Lo cual se traduce en goles en contra. Verbigracia: El Barcelona ha encajado 8 goles en La Liga y el Madrid 18. Sin contar los recibidos en otras competiciones. De  Nacho, Carvajal y Lucas Vázquez -trío siempre lisonjeado por méritos propios- es necesario decir que no están en las mejores condiciones para ser titulares de un equipo obligado a ganar, ganar y ganar...

En suma, la derrota del Madrid frente al Barcelona demostró que no siempre jugar a tumba abierta para remontar resultados adversos, por mor de fallos defensivos, produce los efectos deseados... De ahí que los técnicos del equipo blanco deberían estudiar detenidamente ese problema. Puesto que, aun ganando una competición, si así fuera, no dejaría de ser motivo de enorme preocupación deportiva. O sea...