Sé que los periodistas las pasan canutas para rellenar el folio diario durante el verano. Verdad incuestionable. Pero tampoco es menos cierto que los escribidores del deporte rey deberían tener caletre suficiente para contarnos historias deportivas que nos distraigan. Todo antes que darnos el parte diario acerca del posible fichaje de Kylian Mbappé por el Real Madrid. Tema, a mí me gusta más decir asunto, que se ha convertido en una historia parecida a esa que nos contaban en los años de Maricastaña acerca de 'El monstruo del lago Ness'.
Cito de memoria: creo que fue a mediados de junio cuando a mí me dio por hacerle el artículo a los deseos evidentes del Madrid por fichar a Mbappé. Y además me comprometí a no decir ni pío hasta que el fichaje no se llevara a cabo. Pensando que la contratación del extraordinario futbolista sería cuestión de días. Y, claro, erré... A pesar de que yo era consciente de que la mayor dificultad que había para llegar a un acuerdo entre clubes estaba en obtener el visto bueno de Luis Enrique. Conviene recordar que el asturiano fue jugador del Madrid y no salió bien parado de la 'Casa Blanca'.
También cabe pensar que el entrenador del París Saint Germain esté manejando el traspaso de Mabppé con el fin de que le fichen a varios jugadores de su conveniencia. Es decir: "Yo doy el visto bueno a la operación cuando ustedes, señores dirigentes técnicos, cumplan con las contrataciones deseadas por mí". Motivo suficiente para que la operación se haya ido demorando y hasta puede que incluso no llegue a realizarse esta temporada. O sea: que uno está ya hasta los adminículos de Kylian Mbappé.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comenta mis escritos ,pero desde el respeto.
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.