Blog de Manolo de la Torre


Entrenador de fútbol, ha ejercido la profesión 19 temporadas. Escritor en periódicos,
ha publicado una columna diaria, durante dos décadas, en tres periódicos ceutíes.

jueves, 18 de diciembre de 2025

Mirando hacia atrás

Yo guardo gratos recuerdos de mi estancia en Talavera de la Reina cuando los años sesenta estaban principiando. Mi fichaje por el equipo de fútbol de la ciudad toledana se debió a que su entrenador, Luis Élices, decidió convencerme para que fichara por el Talavera Club de Fútbol, ya extinto. Corría el año 1965. Y logramos jugar la promoción de ascenso a Segunda División A frente a un Éibar en el cual militaba Eulogio Gárate. Ni que decir tiene que la calidad del citado futbolista influyó en nuestra eliminación. 

Ayer, mientras veía el partido del equipo local frente al Real Madrid, sentado en cómoda butaca frente a la televisión, los recuerdos afloraron una vez más. Sobre todo porque de aquel vetusto Estadio en el cual yo jugué muchísimos partidos, hace ya tienpo que surgió un escenario moderno. Amén de que la ciudad también ha progresado en todos los aspectos, según me cuenta de higos a brevas un amigo de aquellos entonces. El cual me telefoneó -nada más acabar la contienda- para saber qué pensaba yo al respecto de la actuación del Real Madrid.

Y mi respuesta fue la siguiente: En principio debo decirte que el fútbol ha ido progresando en todos los aspectos; verdad incuestionable. Pero lo que no ha cambiado es la dejadez con que los futbolistas de los equipos grandes actúan cuando se enfrentan a adversarios inferiores. No me cabe la menor duda de que Xabi Alonso le recordaría a sus jugadores, una y otra vez, la necesidad que tenían de no mirar por encima del hombro a los componentes del equipo talaverano. 

'Que si quiere arroz, Catalina'. Por más que supieran que los futbolistas del equipo local iban a correr más que nunca en un escenario que se vería en gran parte del mundo. Verdad incuestionable. Pero cuando peor estaban las cosas para el Real Madrid Lunin hizo una parada magistral y Kylian Mbappé acabó con las ilusiones de un Talavera que corrió lo indecible a fin de no ser vapuleado por su rival. A propósito: cada día que pasa está demostrado que el Madrid acertó plenamente con el fichaje de la estrella francesa.




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