Buen partido del Madrid en Montilivi

El Gerona es un equipo al que yo le deseo siempre lo mejor. Siempre y cuando el rival no sea el Real Madrid. Puesto que yo guardo muy buenos recuerdos de la ciudad y del Estadio. En el cual siempre obtuve buenos resultados. Y además pude comprobar la categoría de los directivos que en aquellos años setenta y ochenta dirigían los destinos del club. Tampoco he olvidado lo duro que son los inviernos en esa tierra. 

El Gerona Fútbol Club, magníficamente dirigido por Michel Ángel Sánchez Muñoz, más conocido por el sobrenombre de Michel, es un rival que vende cara sus derrotas y sobre todo que no se amilana ante los equipos grandes. Hasta el punto de que es capaz de adelantar las líneas y presionar muy arriba con una insistencia que pone de los nervios a sus adversarios 

El Madrid sufrió de lo lindo durante los primeros minutos del encuentro. Hasta el punto de que los gerundenses tuvieron dos ocasiones claras para adelantarse en el marcador. Una de ellas la evitó el palo y otra la abortó Kepa. El cual está mostrando cualidades muy válidas como portero de un equipo tan grande. Donde, como hemos dicho en repetidas ocasiones, no se trata de hacerse notar mucho sino de parar lo parable y de vez en cuando obrar algún que otro milagro.

Ancelotti no ceja en su empeño de colocar a Camavinga como lateral siniestro. Y los comentaristas y analistas del deporte rey no cesan de preguntarse cuál es el motivo. Y la respuesta podría ser la siguiente: Camavinga es zurdo, veloz, y muy poderoso defensivamente por su enorme sentido de la anticipación. Cierto es que al internacional francés no le gusta actuar en esa demarcación. Pero bien haría en hacer de tripas corazón y corregir los pequeños defectos que le ayudarían a ser una figura indiscutible en esa posición; tanto con su equipo como en la Selección de su país.

El  primer tanto fue obra de Joselu (17'). El segundo de Tchouamení (21') y el tercero de Bellingham (72'). En suma, victoria importante del Madrid. Empañada, todo hay que decirlo, por la brutal entrada de Nacho a Portu. Incomprensible agresión de un jugador que siempre se ha distinguido por su sobriedad y su polivalencia y nunca por su dureza rayana en la malaúva. Ojalá que Nacho haya dado los pasos necesarios para mostrar su arrepentimiento ante quien debe hacerlo.