Mirando hacia atrás

Si yo les digo que Ramón Núñez era un artista genial, seguramente que muchos de ustedes no dudarían en preguntar ¿quién era ése? Pero si a mí se me ocurre decirles que así se llamaba el hombre que se anunciaba en los carteles como Orillo del Puerto, tengo la certeza de que la cosa daría un giro monumental. Nacido en Chiclana de la Frontera en 1932, nieto de la Obispa y hermano de Rancapino -otra figura del cante-, RN decidió vivir en El Puerto de Santa María cuando aún vestía pantalones cortos.

En los años sesenta, si la ocasión lo requería y la situación económica también, yo me permitía el lujo de ver actuar a Orillo del Puerto en los "Canasteros": tablao madrileño que solía ponerse a tente bonete todas las noches. Daba gusto escuchar su cante por bulerías. Y si le daba por bailar el "Cochecito Leré", créanme, la sala crujía de entusiasmo. Era cuando el artista se cantaba y se bailaba, remedando el salto de la cuerda o de la comba, con una gracia imposible de explicar.

Cuando estaban tocando a su fin los años setenta, yo hablaba con Orillo del Puerto casi todos los días en "El Chino": bar situado en la Ribera del Marisco de El Puerto de Santa María. El propietario del bar era una persona excelente. Se llamaba Joaquín Sánchez, apodado El Chino. Muy conocido también por ser el tío de Joaquín, futbolista del Betis.

Ramón Núñez "Orillo del Puerto" explicaba de manera única anécdotas de su vida artística y de sus innumerables viajes por España y el mundo entero.  Y, llegado el momento, se ponía a largar de Antonio Gades, con quien había trabajado muchos años. Parece ser que Gades no se había portado bien con Orillo del Puerto. Es más, éste demostraba con papeles que le había birlado la jubilación.

Joaquín Sánchez "El Chino", a quien le gustaba un cachondeo más que a mí Ursula Andress en bikini, se reía a mandíbula batiente cada vez que Orillo se ponía hablar del  falso comunismo de Gades y de cómo los miembros de la compañía de éste pasaban hambre en Rusia. Cuanto más se reía El Chino, que no era poco, más salero sacaba a relucir el gitano Orillo en la narración de los hechos vividos.

Ramón Núñez "Orillo del Puerto", nacido en Chiclana y vecino de El Puerto de Santa María, durante casi todos los años de su vida, se presentó un día en Ceuta y me dijo que venía a regalarme una actuación en el Pub Tokyo; local regentado por mí en los años ochenta. Y armó un alboroto cantando y bailando el "Cochecito Leré" y arrancándose por bulerías. Cenamos y bebímos  lo que había que beber... Y no aceptó más que un regalo. Nunca más volví a verle.