Sarabia, Betis y Agrupación Deportiva Ceuta FC

Canterano del Madrid que, como muchos otros jugadores, ante la imposibilidad de hacerse un sitio en el primer equipo, decidió aceptar una oferta  del Getafe. Y a partir de ese momento yo decidí seguir sus pasos. Conque no tuve más remedio que convertirme en un asiduo espectador de los partidos televisados del Geta. Y a fe que disfruté de lo lindo viendo cómo se desenvolvía por ambas orillas del campo e incluso como segundo delantero en ocasiones. El fichaje de Pedro Sarabia por el Sevilla me pareció otro acierto de Mochi. En enero de 2017, cuando el club hispalense perdía por 2-1 en el Sadar -con césped en pésimas condiciones-, Sampaoli le dio entrada en la segunda parte y ofreció todo un recital fútbolístico en apenas unos minutos. Ni que decir tiene que su presencia en el campo fue decisiva para que su equipo terminara imponiéndose por -3-4. Su pie izquierdo es de caoba y lo maneja con maestría jugando en el lado derecho. Es, sin duda, el futbolista que mejor desempeña ese cometido en la actualidad. Visto el momento de crisis por el que atraviesa Gareth Bale. Sarabia será, sin duda, un quebradero de cabeza para el Mancheste United. El miércoles próximo en el Sánchez Pizjuán. 

La plantilla del Betis es de las mejores de los últimos años. Y su noveno puesto en la clasificación es de una normalidad apabullante. Es más, por delante suya hay equipos con menos historia y con muchísimo menos presupuesto. Lo cual conviene decirlo para que se enteren quienes no cesan de hacerle el artículo al cuerpo técnico del club verdiblanco por su forma de proceder en el terreno de juego. El Betis juega en una sola dirección: esto es, hacia arriba. Y, en cuanto pierden el balón sus jugadores, Adán se pone a invocar a todos los santos para no verse obligado a tener que recoger el balón en el fondo de su portería. Cincuenta son ya las veces que el guardameta madrileño ha tenido que agacharse para hacer esa maniobra. Sin contar los partidos de la Copa del Rey. La cara de Adán es un poema. Y a veces, cuando lo enfocan las cámaras de televisión, uno tiene la sensación de que está más tenso que la cuerda de un violín. El equipo entrenado por Quique Setién -que yo no creo que esté ni loco ni fumado- sale todos los partido haciendo alardes que no le corresponden. Ya lo dice Joaquín Sánchez -mi paisano-: "Tener que marcar en todos los partidos tres, cuatro o cinco goles para ganar, es  muy complicado". Más que complicado es un milagro. Que dejará de producirse más pronto que tarde. Y a ver cómo se las arreglan sus futbolistas para defender bien. Tarea imprescindible que no han hecho hasta ahora.

Mohamed Chaib me llamó la semana pasada para decirme que me había equivocado al escribir el nombre del primer equipo de la Ciudad. Y le prometí que ya nunca se me olvidará nominarlo como Agrupación Deportiva Ceuta FC y no como Asociación. Pero también le deseé toda la suerte del mundo para el partido frente al Algeciras en el Alfonso Murube. Y es que estaban en juego tres puntos sumamente importantes para el devenir del club presidido por Luhay Hamido y entrenado por Juan Ramón Martín. A quienes aprecio en la medida que ellos suelen distinguirme con el trato que me dispensan. Atento estuve, por tanto, durante la noche del domingo al resultado. Y, nada más saberlo, me produjo la alegría consiguiente. Y mucho más al comprobar que el conjunto dirigido por Juan Ramón Martín había vuelto a dar muestras indiscutibles de solidez defensiva. Tal es así que la Agrupación Deportiva Ceuta sigue siendo el segundo equipo menos goleado del Grupo X. Lo cual indica, como creo haber dicho hace nada, que el bloque funciona perfectamente. Y que salvo cualquier traspié, del que ningún equipo está a salvo, su trayectoria nos invita a creer firmemente en sus muchas posibilidades de acceder al triunfo final.