Conversación sobre el España-Croacia

Antonio Garrido, lector de cuanto escribo y amigo, me llama para intercambiar impresiones acerca de la Eurocopa de Selecciones Nacionales de Fútbol. Aunque él sabe que he visto los partidos precisos. Antonio va al grano: 

-¿Qué te parece nuestra selección?  

-Sigo teniendo mis reservas -le digo. 

-¿A pesar de la goleada a Eslovaquia? 

-Sí, claro que sí... 

-Es decir, que no te gusta nuestro equipo... -responde Antonio a media vuelta de manivela.

-Yo no he dicho que no me guste. Pero...

-¡Uf, Manolo, tú siempre con ese pero adversativo por delante!

-Cada uno es como es. 

-Dime algo agradable de La Roja.

-Pues que es un equipo joven, veloz y que presiona muy arriba. Y sobre todo que no está obsesionada con el tiquitaca.

-¿Por qué no te gusta Busquets?

-Esa pregunta no viene a cuento: porque lo he explicado hasta la saciedad y además lo he escrito recientemente. 

-Cambiemos de tercio...

-¿Qué te parece Croacia?

-Me gusta su centro del campo. En el cual sigue imperando el talento de Modric a sus treinta y cinco años. Me imagino que será escoltado por Brozovic y Kovacic. Con la ayuda, en ocasiones, de uno de los delanteros. 

-A propósito, tú destacaste  muchas veces las cualidades de aquel Mateo Kovacic que jugó en el Madrid.

-Sí., claro que sí. No en vano es un jugador de mucha movilidad, capaz de desbordar contrarios con conducciones de balón muy largas y muy disciplinado cuando le asignan el marcaje de alguna figura. Aún recuerdo algunos de los partidos en los que anuló a Lionel Messi.

-¿Ganará España?

-Lo deseo. Pero...