El Madrid vuelve a dar la de arena en Montilivi

Los aficionados del Real Madrid acabarán asumiendo que la fragilidad defensiva de su equipo ha llegado a un extremo deplorable. Hasta el punto de que a veces causa risa. Parece mentira que Xabi Alonso no haya sido capaz de evitar semejante despropósito. Pues no han sido pocos los errores que hasta ahora han acabado con la pelota dentro de la portería defendida por un Courtois que da muestras palpables de estar hasta los mismísimos de soportar tamaña decadencia defensiva. Quien escribe lo ha venido aireando desde hace tiempo.  

El problema defensivo del equipo merengue se vio con claridad en el partido frente al Rayo Vallecano. Cuyo empate a cero fue engañoso. Dado que el equipo local tuvo ocasiones pintiparadas para golear al visitante. Los jugadores del Madrid desechan sacrificarse cuando no tienen el balón. Desdeñan el correr hacia atrás. No se dan por aludidos cuando les toca hacer coberturas, ayudas o vigilancias. Lo cual no deja de ser una indisciplina que se ha enraizado en la plantilla. Semejante despropósito se vio ayer en Montilivi. Donde los gerundenses gozaron de ocasiones claras de gol.

En el fútbol existe una ley no escrita en la que se dice que el equipo que gana los dos partidos seguidos como visitantes acaba muy bien clasificado. E incluso que es campeón si es aspirante al título. El Madrid empató en Vallecas, en el Martínez Valero y asimismo en Montilivi. Por consiguiente, mucho me temo que la pérdida de esos seis puntos puedan ser añorados en su momento. Del partido cabe decir que Kylian Mbappé marcó de penalti. Un gol más de la estrella francesa que viene cumpliendo con su cometido de manera tan brillante como eficaz. 

A propósito, además de la debilidad defensiva del Real Madrid se nota muchísimo que Fede Valverde y Jude Bellingham no estén en condiciones para jugar como lo hicieron la temporada pasada. Pues ambos, además de la calidad que atesoran, corren de principio a fin. Y, por si fuera poco, sus disparos desde la media distancia son magníficos. En fin, ojalá que Xabi Alonso acierte, a partir de ahora, en sus decisiones. Dado que el Madrid cuando no gana es motivo de protestas a granel. ¡Ah, se me olvidaban los cinco goles encajados en el Estadio Metropolitano!...