Vinicius Júnior brilló una vez más

Vinicius Júnior ha pasado de Estar en Babia a Valer un potosí en menos que canta un gallo. Y perdonen que comience el artículo con frases hechas...  Aun a sabiendas de que no son del agrado de los puristas literarios. Si bien es cierto que estas coletillas hacen más comprensible el milagro que se ha obrado en el brasileño en tan poco espacio de tiempo. Hasta el punto de que ahora tirios y troyanos no dudan en poner al futbolista en los cuernos de la luna. En el más alto pedestal. 

El jugador del Madrid ha pasado de ser motivo de mofa a situarse en la Cresta de la ola de la Liga Santander. ¿Y cómo lo ha conseguido?... Es la pregunta que se hacen quienes desconocen que el orgullo bien administrado produce grandes beneficios. Y no cabe la menor duda, y a los hechos me remito, que el orgullo del extremo del Madrid, durante el tiempo borrascoso, fue superior incluso al que dicen que tuvo don Rodrigo en la horca. Que no era moco de pavo. 

Al grano: el extraordinario momento de juego que está exhibiendo nuestro ya reseñado hombre, hace posible que los rivales más que pensar en cómo atacarle al Madrid centren toda su atención en tratar de  domeñar su rapidez y evitar sus goles. Y es que su ligereza rompe líneas, trastoca cualquier tipo de organización defensiva y cunde la desconfianza generalizada. Es lo que le ha ocurrido hoy al Elche.

 Al Madrid le bastó dominar hasta que marcó el segundo gol. Y sobre todo cargar el juego por su banda izquierda en la que Palacios pedía ayudas continuas para evitar el peligro que representaba Vinicius con balón controlado o bien desmarcándose con celeridad. Sus goles llegaron en el (21') y en el (72'). El segundo fue espectacular. A partir de ahí el equipo merengue cedió terreno y el equipo ilicitano -que jugó con diez, durante media hora, por expulsión de Raúl Guti- luchó denodadamente para batir a Courtois. El tanto  lo obtuvo Pere Milla cuando el encuentro estaba a punto de acabar. Aprovechándose de una jugada desgraciada de Casemiro. El cual no está en su mejor momento. 

En el Elche, equipo correoso y que no había perdido en su casa, destacaron Lucas Pérez y Lucas Boyé: delanteros coriáceos que pusieron a prueba el buen momento de los centrales del Madrid. En suma, el Madrid sumó tres puntos en un campo complicado. Otro día hablaremos de las debilidades mostradas por el equipo dirigido por Carlo Ancelotti. 

Ancelotti debe aprovechar la velocidad de sus jugadores

Yo recuerdo que una de mis mejores temporadas como entrenador, allá por la década de los setenta, fue por tener en el equipo a varios jugadores que parecían galgos. Cierto es que no todos eran capaces de aunar la velocidad con la de acabar las jugadas con la precisión que éstas demandaban. Aunque fueron mejorando con la práctica diaria. La velocidad en el fútbol fue siempre primordial. De ahí que éste no haya dejado de evolucionar desde entonces en ese aspecto.

En el fútbol actuar se tiene menos tiempo para pensar porque se ha convertido en un deporte donde predomina la rapidez en las acciones. De ahí que para jugar en la máxima categoría hay que ser veloz, ligero, pronto... Luego están las estrellas: que son de "pies ligeros" como Aquiles y capaces de ejecutar a tamaña velocidad.  Verbigracia: Cristiano Ronaldo, Lionel Messi y Mbappé. Aunque seguramente habrá jugadores que, por hache o por be, se hayan quedado en mitad de camino. 

El Real Madrid tiene en su plantilla varios futbolistas que son grandes velocistas. Por ejemplo: Militâo, Alaba y Mendy gozan de esa cualidad imprescindible para unos defensas que han de enfrentarse a delanteros hábiles, rápidos  y escurridizos. Máxime cuando su equipo tiene vocación atacante por tradición y necesidad. Ancelotti debe acertar cuanto antes con la misión que mejor le vaya a las aptitudes de Camavinga. Cuya velocidad está pidiendo a gritos que sea aprovechada.  

Misión concreta para el joven jugador podría ser la de media punta; teniendo como referencia al mediocentro rival a fin de estar cerca de la portería adversaria y, cada balón robado, sería una ocasión de gol. Amén de que la velocidad de Camavinga, y su forma de entender el fútbol, sería de mucho beneficio para Benzema, Vinicius y Rodrygo.  

En rigor, pocos equipos pueden presumir actualmente de tener en la plantilla a cinco o seis jugadores muy veloces y que todos ellos puedan ser titulares. Creo que, además de ganar partidos, a Carlo Ancelotti le corresponde, debido a su categoría como técnico, buscar lo mejor para el futuro del Madrid. Y ello se consigue tomando decisiones que no son descabelladas. ¡Ni mucho menos!  

 

 

Defender bien es un arte

Confieso que soy espectador diario de los programas futbolísticos de Real Madrid TV. Y no entiendo cómo es posible que todos los días y fiestas de guardar pongan a parir a los árbitros. A veces por nimiedades. Error mayúsculo que comienza desde que se sabe el nombre del colegiado designado. Actitud que los predispone a sentirse heridos en su amor propio. Y ya sabemos lo que al respecto dijo Alberto Moravia: "El amor propio es un curioso animal que puede dormir bajo los golpes más crueles, pero que se despierta herido de muerte, por un simple arañazo". 

Los dirigentes del equipo blanco deberían darse cuenta de que ese proceder no les beneficia. Ayer por la noche, César Soto Grado, árbitro perteneciente al Comité de Árbitros de la Rioja, dio buena prueba de ello en momentos cruciales del partido. Tampoco Carlo Ancelotti tuvo las ideas muy claras, la verdad sea dicha. En principio, Osasuna es un equipo cuya forma de jugar es harta conocida. Debido a que su entrenador, Jagoba Arrasate, lleva ya varias temporadas dirigiendo a un equipo compuesto por futbolistas que conocen más que bien el sistema táctico adecuado a sus cualidades. 

Los jugadores rojillos, distribuidos en el césped bajo el dibujo 1-5-3-1-1, defienden en bloque. Y lo hacen cerca de su portero o bien lejos de él: Siempre acorde con los problemas que planteen sus rivales. Sus centrales se sintieron ayer muy cómodos con los centros desde los costados por parte de los extremos merengues. Debido a que el equipo carece de juego aéreo. Puesto que Benzema, como es bien sabido, juega como falso nueve. Y, por si fuera poco, Ancelotti no se percata de que necesita un segundo delantero que ocupe los espacios libres que deja el futbolista francés. 

No le basta al Madrid con que Kroos y Modric- ayer ausente- traten de cumplir esa misión por los costados. Y, desde luego, lo ilógico es que Casemiro se sitúe en una zona de nadie. Es decir, que ni es escudo de la defensa ni mucho menos mediapunta. Por más que el brasileño ponga empeño en ese cometido. Si a ello le sumamos el escaso rendimiento de Marco Asensio y la insistencia de jugar por la banda de Vinicius, lo que evita que se genere la sorpresa, tenemos a un Madrid que no asusta a nadie. Y mucho menos a Osasuna; compuesto por jugadores solidarios en las ayudas, basculaciones, coberturas y relevos. En suma: Un equipo cuyas debilidades las minimiza con un fútbol defensivo. Defender bien es un arte.     

  

Espectáculo para la hora de la digestión

Es el título de un artículo de Cela que se publicó en la revista Mundo de Barcelona, como muchos otros, durante cincuenta y tres semanas, y que fueron impresos en libros. Los cuales vieron la luz a principios de la década de los noventa. Hoy, leyendo el número 23 de la colección, donde viene Espectáculo para la hora de la digestión, don Camilo José escribe de la televisión de entonces con tanta sorna como verdad.

La televisión nos ofreció la otra tarde, a la hora del café, un espectáculo insólito y quizá no del todo digestivo: la matanza del cerdo según las más modernas y científicas y estremecedoras técnicas. El matarife sonreía a la cámara mientras afilaba el cuchillo, clavaba el cuchillo y limpiaba el cuchillo, al tiempo de sonar una música de fondo muy delicada y que más propia pareciera para un sarao en la brillante corte del Rey Sol. 

Curándose en salud, el locutor nos explicó a todos que el sacrificio del cerdo era un mal necesario, lo que no deja de ser muy sagaz advertencia. Confío -decía Cela- en que la televisión madure y llegue a ofrecernos el funcionamiento de un urinario público o la buena marcha del depósito de cadáveres. Cada día que pasa dudo menos de que la televisión es, en efecto, un vehículo de cultura..

Pues bien, cuarenta y tantos años después de lo escrito por don Camilo, tomemos un día cualquiera. Regresa una persona a su casa harto de trabajar y, durante la cena, tiene que tragarse la subida del precio de la luz y del trigo. La tragedia del volcán de la isla de La Palma y las penalidades que están pasando los habitantes del lugar. Las melopeas cogidas por jóvenes reunidos en plena calle, sin mascarillas y sin guardar distancia alguna, y, por si fuera poco, amenazando a los agentes de la autoridad.

Cada dos por tres el hombre escucha atentamente que es muy probable que la Covid-19  mute en otro virus de peores intenciones. Y que el personal sanitario está asustado porque, además de ser poco, sigue sin tener los medios suficientes para combatirlo. Y, naturalmente, se acongoja ante tales noticias. Cambia de canal, pero que si quiere arroz... Pues lo que halla es a la señora del tiempo que anuncia lo peor para el día siguiente. En fin, que cae en la cuenta de que lo que existe es un auténtico concurso diario entre las diversas cadenas para ver cuál bate el récord de las malas noticias. 

¿Cómo sorprenderse, pues, de que sintamos una especial ternura por las cuestiones deportivas? Único terreno en el que, de vez en cuando, las gentes tienen un aire satisfecho. Porque si siempre existe un perdedor, forzosamente tiene que haber un ganador. O sea. 

Vinicius exhibe su juego en el Camp Nou

Creo que Mingueza, además de no conciliar el sueño esta noche, no olvidará nunca que el 24 de octubre del año 2021, en un partido frente al Madrid en el Camp Nou, Vinicius lo llevó por la calle de la amargura. Hacía mucho tiempo que yo no veía a un extremo eludir el marcaje de un defensor con tanta facilidad y sobre todo siendo un peligro constante para la portería defendida, en este caso, por Ter Stegen. Y todo ello ante la mirada de un entrenador que fue incapaz de cortar de raíz la vía de agua por la cual se estaba hundiendo su equipo. La inacción de Ronald Koemann, curtido en mil batallas futbolísticas, me pareció de mucho descrédito para el técnico holandés.

Vinicius Júnior, hasta hace nada, era considerado como un futbolista demasiado vivo e inquieto y que hacía las cosas atropellada y desordenadamente. Hasta el punto de que lo calificaban de torbellino. Hubo momentos en los que fue criticado acerbamente. Pareceres amargos que el joven brasileño soportó estoicamente. Que es la única manera de sobrevivir al miedo escénico del Bernabéu y a las exigencias de una afición acostumbrada a ganar, ganar y ganar. A la chita callando, sin decir ni pío, Vinicius se ha convertido en una pieza clave de su equipo. 

A mí me recuerda el internacional brasileño, a pesar de su juventud, a Gento; cambiando lo que haya que cambiar. Cuyos principios en el Madrid fueron tortuosos. Pero, dada su velocidad, tuvo el apoyo constante de Alfredo Di Stéfano. Y, claro es, gozó de todas las oportunidades habidas y por haber y acabó deslumbrando a tirios y troyanos. El extremo brasileño, afincado en Madrid desde que era juvenil, ha logrado desquiciar hoy al Barcelona. Su actuación ha roto a los azulgrana por el lado derecho de su defensa. Lo cual ha sembrado el desconcierto generalizado de todo el equipo. 

El Madrid, a pesar de que Rodrygo no acaba todavía de rendir como se espera de él, aprovechó el gran  momento de Vinicius, buen socio de Benzema, para imponerse a su rival. El gol de Alaba (31') fue justo premio a la superioridad mostrada hasta entonces. Verdad es que el Barcelona tuvo una ocasión en los pies de Dest y otra en la cabeza de Piqué. En la segunda parte, al Madrid le hizo daño la salida de Coutinho y sobre todo la posición de éste en el terreno de juego. El brasileño merodeó por la zona de Casemiro a sabiendas de que podía ganarle la partida. Y así fue; de hecho el Barcelona se apoderó del centro del campo y puso en apuros a Courtois.

El gol de Lucas Vázquez, cuando el partido estaba dando las boqueadas y el Madrid ya se empleaba nada más que al contrataque, aseguró la victoria de los blancos. El tanto de Agüero nunca se recordará. Pues llegó demasiado tarde.  

 

Nuestro alcalde está pasado de moda

Me para por la calle un conocido a quien le sentaba mal ser criticado por cualquier error cometido cuando participaba en la política activa. Incluso se decía de él que a partir de ese momento sólo pensaba en cómo tomarse la revancha. Tras los saludos de rigor, pues es más cumplido que un luto..., no duda en recordarme que llevo ya muchos días sin mencionar a Juan Vivas. Y, a renglón seguido, va y me dice: "De seguir así, créeme, que perderás muchos lectores".

Las palabras de mi interlocutor merecían que yo hubiera deslizado una frase hiriente en la conversación, pero me abstuve. Y, claro es, dado que nos conocemos desde hace la tira de tiempo, le respondí así: Verás, Fulano, si no escribo de nuestro alcalde es porque está pasado de moda. Es decir, que carece de interés. Y ello se nota en cómo bajan los clics del blog cuando opino acerca de él. No olvides que Vivas lleva más de dos décadas en la poltrona. Cargo que proporciona poder a quien lo ostenta. Pero también causa aburrimiento en la sociedad ceutí.

-¿Quieres decir que  los ciudadanos y ciudadanas de esta tierra están hasta los mismísimos de su alcalde? -inquiere mi conocido.  

-Más o menos...:  No olvides que la gente está siempre ávida de novedades. Y nuestro alcalde se ha convertido en el Matusalén de los políticos con cargos. 

-De acuerdo, Manolo. Pero, dado que él se siente a gusto como primera autoridad y además es votado por una mayoría que airea, a cada paso, "que más vale lo malo conocido que...", tengo la certeza de que si se presenta en las próximas elecciones, que lo hará, ganará sin bajarse del autocar. Como decía Helenio Herrera en sus días de vino y rosas.

-Y razón llevas en lo que dices. Así que te cuento: en Ceuta es casi imposible que haya un candidato  con tirón suficiente para destronar a Vivas. Sí podría hacerlo un compañero de su partido. Mas eso no ocurrirá mientras que el presidente del PP en Ceuta se oponga a ello. Ahora bien ese presidente, que es nuestro alcalde, podría darse el piro si acaso los miembros de VOX siguen sacándole de sus casillas en las sesiones plenarias. Por el motivo siguiente: "Cuando los políticos, de mayor o menor envergadura, se dedican a defenderse como gatos panza arriba, ha llegado el momento de echarlos...   

 

Victoria pírrica del Barcelona

Es el título de un artículo publicado en un periódico deportivo -de tirada nacional- y que se refiere a la obtenida por el Barcelona frente al Dinamo de Kiev en la Champions League. Y, dado que yo fui espectador del encuentro por televisión, el enunciado me extraña en la misma medida que me genera dudas. Así que empecé a preguntarme: ¿Acaso ganar por la mínima diferencia, o simplemente por un gol a cero, no le ha valido de nada al equipo azulgrana? ¿Se le habrán lesionados tantos futbolistas en la contienda como para que el domingo sean bajas ante el Madrid? Y así sucesivamente...

Y me explico: se llama victoria pírrica, como todos ustedes saben, a la que se consigue a costa de grandes pérdidas. Una victoria en que el vencedor sale peor parado que el vencido. Que fue lo que le ocurrió a Pirro. El cual fue un rey del Epiro, con deseo de conquistar Sicilia, Italia y hasta África. El cual en Heraclea había logrado una victoria a costa de grandes pérdidas, sin que le sirviera para nada. Fue la primera victoria pírrica de la historia. 

La victoria del Barça ante el equipo ucraniano, gracias al gol obtenido por Gerard Piqué, tiene un valor indiscutible; debido a que le ha permitido recortar distancias con el Benfica: segundo clasificado en su grupo de la Champions League. Amén de generar confianza en sus jugadores para afrontar en las mejores condiciones el enfrentamiento con el Madrid. Por cierto, conviene decir cuanto antes que sus jugadores más destacados fueron  Jordi Alba y Piqué. El primero no ceja en su empeño de ser un incordio permanente para sus adversarios. 

En el Madrid, claro es, desean obtener una victoria. Aunque sea pírrica. ¡Ah!, perdón por lo de pírrica...: quiero decir una victoria por la mínima diferencia o simplemente por un gol a cero.  

 

El 4-3-3 del Madrid en el Olímpico de Kiev

Cualquier sistema de juego es bueno si se cuenta con los jugadores adecuados para llevarlo a cabo. Aunque el 4-3-3 no deja de ser una distribución rígida de los futbolistas y por tanto previsible para los rivales. Es un recurso útil para los equipos que juegan con funciones limitadas; es decir, sin medios capaces de dar la talla en el ataque. Puesto que la figura del media punta brilla por su ausencia. El Madrid, sin embargo, con ese dibujo, goleó al Shajtar Donetsk en el Estadio Olímpique de Kiev y, además, jugando a muy grande nivel.

Triunfo conseguido mediante un gran rigor táctico de mucho orden en las líneas y de una gran compenetración de los jugadores para no crear deficiencias tácticas. La defensa merengue conectó muy pronto con el centro del campo. Ese paso adelante llevaba consigo el alejamiento de los delanteros ucranianos y, por supuesto, el que Kroos y Modric, con su dotes técnicas, gozaran de la oportunidad de enviar balones a los espacios libres para Vinicius y Rodrygo. Dos extremos abiertos a las bandas como exige el sistema ya reseñado y con Benzema jugando como es habitual en él. 

El Madrid dominó la situación desde que principió el partido. Sus jugadas acababan siempre en disparos a la portería defendida por un Trubin dubitativo e inseguro. Pero el primer el gol lo marcó Kryvtsov en propia puerta. En la segunda parte llegaron los tantos de Vinicius. El primero, tras una jugada perfecta entre Benzema y Modric; el segundo se celebró como le correspondía al golazo del brasileño. El cuarto lo obtuvo Rodrygo (a propósito: ojalá que éste consiga mantener una regularidad en su juego que le permita ser insustituible). Y Benzema logró el quinto. 

El- 4-3-3 dio resultado en esta ocasión. Mas Ancelotti sabe que ese sistema es frágil en cuanto los extremos no cumplan con su doble misión; o sea, atacar y defender sin descanso. Ah, Courtois intervino lo justo y, como siempre, muy bien.  

Ansu Fati fue el mejor del Barcelona-Valencia

Los partidos Barcelona-Valencia, o viceversa, gozan siempre de gran interés. Así que ayer acudí presto a sentarme frente al televisor de la sala de estar, convencido de que no habría motivo alguno para que el aburrimiento hiciera acto de presencia. Y a fe que ambos equipos cumplieron con el objetivo de entretener a los espectadores del principio al fin. Todo comenzó con el gol de Gayá a los cuatro minutos. Lo hizo de potente disparo desde fuera del área, aprovechando un rechace de la defensa azulgrana. 

El tanto marcado por el lateral valenciano no causó zozobra alguna en el Barça y sí obnubiló las ideas de José Bordalás. Quien no supo tapar a tiempo el agujero que se estaba produciendo por el lado de  Foulquier. Magnífico defensa, sin duda alguna; pero no el más indicado para marcar a Ansu Fati, debido a su estatura (1,86 m.) Para cumplir esa misión es necesario asignársela a un lateral con menos centímetros, veloz, y gran sentido de la anticipación. Y sobre todo que sepa aguantar los envites del atacante con las piernas semiflexionadas y la vista puesta en el balón.

Alguien podría responderme que Paolo Maldini, lateral italiano, tenía una estatura considerable. Pero siempre se ha dicho que una golondrina no hace verano... Al grano: Mi parecer es que José Bordalás, a quien he destacado en ocasiones por sus aciertos tácticos, ayer estuvo en Babia. Distraído en el banquillo. Sin caer en la cuenta de que el marcaje de Foulquier al futbolista bisaguineano -nacionalizado español- era un error. Y los errores en el fútbol se pagan con la derrota. Ahora bien, también conviene airear que no es fácil marcar a la estrella azulgrana. 

En memoria de Manuel Solano Cañado

Suena el teléfono: Luis Soriano, amigo de siempre, me dice que ayer falleció Manolo Solano. Y a la súbita pena se unen los recuerdos de quien conocí en el Écija Balompié: Equipo que estaba a punto de descender y al que llegué para evitar lo que ya parecía irremediable. En el primer entrenamiento, ya me di cuenta de la calidad que atesoraba Solano como jugador. Estaba recién comenzada la década de los setenta y Manolo había cumplido veinte años.

En el equipo astigitano había estado jugando a su aire. Así que le dije que su calidad estaba pidiendo a gritos un mínimo de orden. Y lo situé en el centro del centro del campo con misiones concretas. Su rendimiento fue suficiente para sumar puntos y salvarnos del descenso. Pronto se ganó mi amistad y mi admiración como futbolista. Así que hice todo lo posible para incorporarlo a la Sociedad Deportiva Ibiza. Ni que decir tiene que tardó un amén en meterse a los aficionados ibicencos en el bolsillo. 

También lo tuve en el Mallorca. Temporada aciaga por falta de medios económicos. Pero Manolo Solano destacó sobremanera. Jugó de dulce toda la temporada. Estuvo en un tris de ser fichado por el Valencia; pero Mestre-a la sazón director técnico-se durmió y el Levante U D se hizo con sus servicios. Pronto llamó la atención como uno de los mejores centrocampistas de la Segunda División A. Fue lesionado de gravedad, tras una durísima entrada, y salió de la operación con una ligera cojera. Así que decidió dejar el fútbol.

En la temporada 79-80 firmé yo en el Racing Portuense. Y le dije que contaba con él. Aun sabiendo que su cachet, aunque lo redujera, era excesivo para el club. Y además los directivos fueron informados de la secuela que le había quedado en un pie. Es más, me permití decir lo siguiente: Manolo Solano, tal como está en estos momentos, es capaz de ser el mejor del equipo en todos los partidos. Y acerté: dirigió al equipo magistralmente desde cualquier posición del centro del campo. Y estuvimos a punto de ascender.

Tres temporadas compartí con él en el equipo de mi pueblo. Fuimos amigos de verdad. Nos conocíamos muy bien para no serlo. Su fallecimiento me ha causado gran pesar. Manuel Solano Cañado, amigo de verdad, descansa en paz...  

Opiniones futbolísticas

Erling Haaland, desde hace la tira de tiempo, es portada casi diaria de los periódicos deportivos de tirada nacional. Al jugador noruego, perteneciente al Borussia Dortmund, lo han convertido en una especie de Monstruo del Lago Ness: Animal legendario que en su época valía para paliar la falta de noticias durante los veranos. Con semejante redoble de tambor de la prensa, uno ha llegado a la siguiente conclusión: Cuando el futbolista escandinavo fiche por el Madrid, si acaso ese hecho se produjera, los aficionados merengues estarían ya tan hartos de oír su nombre que, ávidos de nombres nuevos, no le prestarían la atención debida. Así que pasaría a ser poco más o menos como un Jovic cualquiera. Y es que la insistencia desemboca en aburrimiento.

Sergio Ramos, después de haber sido noticia permanente, durante meses, por echarle un pulso a Florentino Pérez, llegó a París lesionado y convencido de que sería el comandante en jefe del equipo parisino. Lo cual, al parecer, le sentó como un tiro a Mauricio Pochettino. Quien no dudó en airear que no le había gustado la forma de proceder del camero. El tiempo, que pone a todo el mundo en su sitio, está demostrando las razones que tuvo el presidente del Madrid para no renovarle el contrato al Gran Capitán. A pesar de las críticas negativas que recibió durante ese período. De momento, los franceses consideran que el fichaje de Ramos ha sido un fiasco. Fracaso del que podría redimirse si juega la Champions League y la gana su equipo. 

Mikel Oyarzabal es el mejor jugador de la Real Sociedad. De ahí que también sea indiscutible en la Selección Española. Muchas veces me he preguntado cómo es posible que el extremo donostiarra no haya llamado la atención de Madrid, Barcelona o Atlético. Sus cualidades son varias y destacadas; así que le permiten gozar de una condición futbolística extraordinaria. Es rápido, tiene desborde, es muy bueno tácticamente y marca goles. Y, por si fuera poco, se sacrifica cuando le toca defender. Jugar tantos partidos, y al ritmo que él impone, acarrea lesiones musculares. Será baja en su equipo y en La Roja.  

 

La suerte de Sergio Busquets

Es el futbolista más protegido por la prensa deportiva. Y quien escriba acerca de él, si no es para halagarlo, ya sabe que le lloverán las críticas acerbas. Busquets es consciente de que goza del amparo de la mayoría de los opinantes. Los cuales forman una claque dispuesta a colmarlo de ditirambos, aunque no tengan motivos para hacerlo porque sus carencias, con el paso de los años, han ido a más y se ven a una legua de distancia.  

Sergio Busquets es una persona con suerte; sobre todo al estar arropado por quienes adoctrinan al personal. Así que sale al terreno de juego convencido de que haga lo que haga siempre estará respaldado por muchísimos seguidores que hablan y no acaban de sus innumerables cualidades. Si se le presta atención a los movimientos en el césped del mediocentro de la Selección y del Fútbol Club Barcelona, lo primero que se descubre es la facilidad que tiene para pasar inadvertido cuando sus rivales contraatacan. Y lo hace con una habilidad pasmosa: dejándose rebasar siempre por el balón y quedándose a la espera en una zona de confort.

Semejante actitud, es decir, la de no defender como debe hacerlo un escudo de la defensa, la soportan  los centrales del Barcelona: Sobre todo Gerard Piqué. Y, sin embargo, hay gacetilleros que lo cuentan al revés; o sea, que los defensas son los culpables de los goles que encaja el equipo, siendo Piqué el peor por estar ya, según ellos, lento y sin recursos. Conviene decir también que los últimos entrenadores azulgrana fueron despedidos tras haber prescindido de Busquets en algunos partidos y haberlo sustituido en otros tantos. 

Las cualidades de Busquets son harta conocidas. Pases a un toque en espacios cortos y situación en una zona donde se aprovecha de los balones rechazados. Luce lo justo cuando su equipo se adueña de la pelota. Ahora bien, carece de gol. No es bueno en el juego aéreo. Ni se prodiga en el tiro desde la media distancia. Y, por si fuera poco, no es capaz de correr hacia atrás cuando los rivales contraatacan. Por más que Piqué le llame la atención a voz en cuello. 

Leer para escribir

Decido leer un rato, tras dar una cabezada después de comer, y se me echa la noche encima enfrascado en Leer para escribir: Título del libro. Así que, debido a su interés, me he olvidado de escribir el artículo de hoy. Y lo que es peor: Carezco de asunto, o de tema, como se dice actualmente, para cumplir mi cometido. Por lo que, de prisa y corriendo, para estar con ustedes a las diez de la noche, procuraré espigar algunas notas literarias de este taller de escritura. 

"Mentir no es sólo decir lo que no es. También y sobre todo significa decir más de lo que es, y, en lo que respecta al corazón humano, decir más de lo que se siente. Esto es algo que hacemos todos para simplificar la vida." Albert Camus.

La pasión por el lenguaje: "La vida, contemplada objetivamente y sin ilusión, es una historia sin sentido contada por un matemático idiota. Violar la lógica es poseerla." Lewis Carroll. 

La descripción sugerente: "Escribir brevemente, es decir, con talento... La brevedad es hermana del talento... El lenguaje debe ser simple y elegante. Sin extranjerismos ni palabras raras. Creo que cuando uno ha terminado de escribir un cuento, debería borrar el principio y el final." Anton Chéjov.

La degradación y el razonamiento: "Ya hacía mucho tiempo que se me había ocurrido una idea; pero me arredraba la de hacer de ella una novela, pues el argumento es bastante difícil, y no estoy yo preparado para tocarlo, con ser tentador y gustarme a mí mucho. Esa idea es... la de presentar un hombre completamente bueno." Fiodor Dostoievski.

"Algunos temas se respiran en el aire de un tiempo; también están en la trama de una vida. Sólo puede comprenderse un conflicto si se distancia en el espacio y en el tiempo". Marguerite Yourcenar.

"El artista es despiadado si es un buen artista. Tiene un sueño y ese sueño lo angustia tanto que debe liberarse de él a cualquier precio. Hasta entonces no tiene paz". Willian Faulkner.

"Necesito encontrar un estilo para sentir un tema. Apruebo -en la escritura de la novela- el ideal de la palabra justa, precisa y exacta." Gustave Flaubert.

"Lo cierto es que el hecho de escribir obedece a una vocación apremiante, que el que tiene la vocación de escritor tiene que escribir, pues sólo así logra quitarse sus dolores de cabeza y su mala digestión".  Gabriel García Márquez.

Escribir es una forma de terapia. A veces me pregunto cómo se las arreglan los que no escriben o los que no pintan o componen música, para escapar de la locura, de la melancolía, del terror pánico inherente a la condición humana".  Graham Greene.

"Cuando escribo, en mí no hay ningún dogma. Pienso que la vida es así; si hay ternura sale; si hay posición política, sale; quiera o no lo quiera el autor, siempre y cuando estén en la vida. Juan Carlos Onetti. 

Aprisionar lo fugaz: "A veces reflexiono un cuarto de hora para poner un adjetivo antes o después de un sustantivo. Procuro contar: primero con verdad, segundo con claridad lo que pasa. No veo más que una regla ser claro." Stendhal. 

 

 

En él se dice que Flaubert dormía con el Diccionario

Luis Aragonés no soportaba a los gilipollas

Ayer por la noche, viendo un reportaje sobre Luis Aragonés en Vamos Televisión, brotaron en mí los recuerdos de cómo lo conocí y de las magníficas relaciones que mantuvimos hasta que se fue a ese lugar del cual nunca se vuelve. Ambos coincidimos en el curso de entrenador nacional en 1973. El cual quedó marcado por el fallecimiento de su director, José Villalonga, el primer día de clase. Pronto me percaté de que LA era un tipo serio, responsable, y muy poco dado a entablar conversación porque sí. Era muy reservado. 

Luis destacó muy pronto como alumno por haberse leído los apuntes del curso de cabo a rabo. Verdad es que gozó del privilegio de tenerlos antes que quienes no pertenecíamos a la Federación Castellana de Fútbol. Pero tampoco es menos cierto que llegó muy preparado en la teoría y luego destacó sobremanera en las demostraciones prácticas. Un día, en vista de que formábamos parte del mismo grupo de aspirantes al título, a mí me tocó ordenar lanzamientos de faltas desde fuera del área  y desde distintos puntos. 

Lo primero que hice es elegir a Luis como tirador de todas ellas, tras ordenar las barreras correspondientes. Ni que decir tiene que fue una gozada ver cómo el jugador rojiblanco golpeaba el balón. Ahí nació nuestra amistad. Aunque debo decir que él ya se había preocupado de conocer mi historial como entrenador en distintos equipos a los que llegué cuando estaban ya abocados al descenso. Y a partir de ahí, cuando coincidíamos en nuestro tiempo libre, pegábamos la hebra. Así que descubrimos tener amigos en común. 

Amigos que veraneaban en El Puerto de Santa María. Y, por si fuera poco, siendo él ya entrenador del equipo rojiblanco, el Portuense, entrenado por mí, tuvo la suerte de que el bombo lo enfrentara al conjunto colchonero en la Copa del Rey. Recuerdo perfectamente nuestras conversaciones en el Motel Caballo Blanco, lugar elegido por la expedición atlética para alojarse. Charlas sobre fútbol que duraron hasta pasada la media noche. 

En 1982, recién llegado yo a Ceuta, se organizó un Trofeo veraniego. Los participantes fueron Atlético, Dukla de Praga y Agrupación Deportiva Ceuta. Luis, Vicente Calderón y servidor estábamos charlando de fútbol en la cafetería del Hotel La Muralla cuando se acercó un directivo del equipo local y empezó a emitir sus opiniones balompédicas ante el asombro del técnico madrileño. Cuando Luis estaba a punto de mandarlo allá donde el viento da la vuelta, el presidente rojiblanco, que tan bien lo conocía, logró que el individuo lo siguiera hasta la recepción para no sé qué asunto... 

Cuando nos quedamos solos, Luis se dirigió a mí de esta guisa: "Manolo, conociéndote, mucho me temo que tú no aguantarás las impertinencias de este directivo ni siquiera un mes" Y es que Aragonés se alteraba en cuanto un gilipollas irrumpía en su espacio y se ponía a pontificar de lo que no tenía ni idea. Y acertó... 

 

 

Derrota dolorosa de España

Se había dicho hasta la saciedad que España era mejor equipo como conjunto; realidad incuestionable que fue aceptada por propios y extraños. Pero que enfrente tendría a un combinado francés con tres estrellas capaces de resolver el partido en un santiamén. Es decir, en dos o tres acciones imposibles de evitar. Y así sucedió. A pesar de que nuestra selección jugó mejor que sus rivales y además se adelantó en el marcador por medio de Oyarzabal cuando se llevaban jugado sesenta minutos. 

Francia jugó con 1-5-3-2. Frente al 1-4-3-3 de España. Aunque hubo una variante durante gran parte del encuentro: Greezmann marcaba a Busquets a la hora de defender. Posición que lo situaba en ataque por detrás de Benzema. Aun así, el centro del campo francés no funcionaba y por tanto Mbappé no entraba en juego y Benzema bullía muchísimo como llanero solitario. La situación hizo que nuestra selección fuera a más mientras que la francesa iba a menos. Debido a que acusó la lesión de Varane.

Me explicó: Oyarzabal -futbolista sensacional- se alejaba del marcaje de Varane convencido de que éste no saldría de su zona y le permitiría llegar con el balón controlado desde atrás. Pero el exjugador del Madrid afrontó el reto de perseguir al guipuzcoano a mucha distancia de su zona de seguridad. Y a fe que lo hizo muy bien. Hasta el punto de que su baja -por lesión- la acusó muchísimo Francia. Cundió la inseguridad en sus líneas. Puesto que decidieron mirar más hacia atrás que hacia adelante.

En la segunda parte, tras un remate de Theo al palo, llegó la contra que le permitió a Oyarzabal adelantar a España en el marcador. Corría el minuto 63 y todo parecía ponerse de cara para los hombres dirigidos por Luis Enrique. ¡Pero que si quiere arroz, Catalina! Dos minutos después, Benzema obtenía el empate en jugada con Mbapeé. Y éste, en plena euforia francesa, marcaba el segundo tanto. Gol muy discutido por por posible fuera de juego y que le dio la victoria a los Blues. 

Como se esperaba, España dio la talla como conjunto que se defiende con la posesión del balón y que usa el contraataque como acción letal. Aunque tampoco se descartaba que sus cualidades no pudieran imponerse a las individualidades de su rival. Sucedió lo segundo. A pesar de que Pogba no estuvo a la altura de Mabppé y mucho menos de Benzema. El jugador del Madrid  fue el mejor de los suyos y del partido. 

 

Sobre la final de la UEFA Nations League

El Francia-España de mañana promete ser uno de esos partidos que hacen afición. Ambas selecciones cuentan con grandes jugadores y además sus actuaciones en la UEFA Nations League han estado a la altura de la fama que atesoran ya sus futbolistas. No obstante, mentiría si no dijera que los franceses cuentan con varias estrellas capaces de resolver un encuentro en un amén...  Y si bien España ha dado muestras visibles de ser mejor como conjunto, Benzema, Mbappé, Griezmann y Pogba no son moco de pavo. 

Tanto Deschamps como Luis Enrique son partidarios de usar el falso 9, también conocido como delantero centro flotante. Benzema realiza esa misión en el Madrid desde hace la tira de tiempo. El seleccionador español también la lleva a cabo por medio de delanteros como Ferran Torres, Oyarzabal o Pablo Sarabia. A los centrales no les gusta salir de su rincón de seguridad para marcar a tales atacantes. Así que éstos, si son buenos técnica y tácticamente, se convierten en piezas vitales de su equipo, ayudando a los centrocampistas y siendo los mejores asistentes de sus compañeros que llegan a ocupar los espacios vacíos.  Además de prodigarse en los tiros desde la media distancia. 

Lo ideal para combatir la posición de los nueve falsos sería prescindir de uno de los centrales y alinear a un centrocampista con cualidades defensivas y suficiente movilidad para perseguir al delantero errante. Cada vez que opino sobre esta acción táctica, siempre me acuerdo de cómo Di Stéfano campaba por sus respetos en el campo hasta que un día llegó Iturraspe y eligió a José Mangriñán para que lo siguiera por toda su zona de influencia. Así que Di Stéfano fue anulado con ese marcaje al hombre que ahora se ve como si fuera un recurso desatinado. 

España tratará de defenderse mediante la posesión del balón. Pero habrá de cuidar mucho las pérdidas de la pelota. Por carecer de ese escudo de la defensa capaz de proteger a sus compañeros de la zaga. Sí, ya sé que esa labor le está encomendada a Busquets. Quien ya no está para esos trotes. Ojalá que los franceses no se aprovechen de esa ventaja en el centro del centro del campo.

 

 

 

Francia-Bélgica: partidazo

Ni por asomo esperaba yo que franceses y belgas ofrecieran semejante espectáculo futbolístico. Durante el partido ha habido, además de buen juego, emoción a raudales. La selección belga comenzó generando peligro desde el principio. Debido a que el centro del campo de los blues no funcionaba y por tanto sus estrellas no daban señales de vida. Los dos equipos jugaban bajo un sistema muy parecido: 1-5-3-2 en defensa y sin embargo remisos en ataque. 

La selección belga fue superior durante la primera parte. Presionó muy arriba y logró que Lukaku desquiciara tanto a Varane como a Koundé. También Carrasco pudo con su marcador. El primer gol lo logró el jugador del Atlético de Madrid. Corría el minuto 36 y los franceses acusaron el golpe. Y, por si fuera poco, cuatro minutos después, Lukaku lograba el segundo de un chutazo impresionante. Con dos goles y dominando el encuentro, todo parecía a favor de los hombres dirigidos por Roberto Martínez.

En la segunda mitad, Bélgica cometió el error de dormirse sobre los laureles. Lo cual unido a que Eden Hazard, que había dado pruebas evidentes de mejoría, acusó cansancio y estuvo en el césped más tiempo del debido. Situación que aprovecharon los jugadores dirigidos por Didier Deschamps para imponer su ritmo y su calidad. Fue entonces cuando surgió Kylian Mbappé. Y un pase del jugador del París Saint Germain lo envió Benzema a la red (62').  Poco después marcó de penalti Mbappé. Y, cuando parecía que habría de jugarse una prórroga, Theo Hernández batió a Courtois con un disparo desde fuera del área. 

Gran partido el realizado por las dos selecciones. De esos que uno no quiere que acaben nunca.. Francia será, pues, el adversario de España en la final de la Liga de las Naciones de la UEFA. Rival difícil. Que hoy ha ganado a pesar de mostrar fisuras en su defensa y un mediocampo endeble. Aunque de un equipo que cuenta con jugadores como Benzema, Mbappée,y Pogba, entre otros grandes futbolistas, conviene no fiarse un pelo. 

 

España desarboló a Italia

El triunfo de España, merecido a todas luces, fue debido a que jugó una primera parte sensacional ante una Italia cuyo seleccionador sigue sin remediar el problema que su equipo tiene cuando los centrales, Bonucci y Bastioni, se quedan sin referencias de marcaje. Pues ambos sufren de lo lindo cuando se les juega con delanteros falsos o flotantes. Que para el caso es lo mismo. Cierto es que no todas las selecciones cuentan con Oyarzabal y Ferran Torres. Futbolistas capaces de sacar de quicio a jugadores que no se atreven a perseguirles cuando salen de su zona para enlazar con los centrocampistas.

Nuestros jugadores se hicieron muy pronto dueños del balón y buscaron con ahínco la portería de Donnaruma. Quien, por cierto, con sus saques en corto, tratando de que sus compañeros salieran jugando la pelota desde atrás, facilitaba aún más el dominio de una España que dominaba el centro del campo. El desbarajuste de la Azzurra lo aprovechó La Roja para marcar dos goles por medio de Ferran Torres a pases de Oyarzabal. En los minutos 16 y 44. Y, por si fuera poco, los italianos se quedaron con diez por expulsión de Bonucci cuando se acababa la primera parte.  

A partir de ahí fue un querer y no poder de los hombres dirigidos por Roberto Mancini. Quien no supo, una vez más, reaccionar ante el sistema empleado por Luis Enrique. Recuerdo un partido en el cual España goleó a Italia empleando el mismo ardid. Cito de memoria: creo que fue en Sevilla y Morata se aprovechó de las facilidades que le dieron los ya citados zagueros italianos. En la segunda parte, España fue a menos y sus adversarios, con más corazón que juego, nivelaron la contienda. Hasta el punto de que Insigne falló una clara ocasión de gol y además Pellegrini redujo distancias en el minuto 82. Insisto: la selección Española fue mejor que la italiana. Cuyo planteamiento fue impropio de un combinado tan prestigioso.

Opinar con retraso

Hace dos días se celebró en Valencia la Convención Nacional del Partido Popular. Dado que el acontecimiento político no ofrecía para mí ningún interés, a pesar de que la intervención de nuestro alcalde me aseguraba tema para opinar, decidí no verlo. Y tampoco le presté la menor atención a lo que se dijo en los medios hablados o escritos. Así que ha sido hoy cuando me he enterado de lo que dijo Juan Vivas en su disertación: "Ceuta es la capital del respeto y la concordia". Y, aunque detesto torear a toro pasado, no me resisto a emitir mi parecer.

Juan Vivas, que tiene sus virtudes, a veces pierde la prudencia, se enciende, mete la pata, y, metiendo la pata, queda "a la Altura del betún". ¡Qué precio tan absurdo tiene que pagar a veces nuestro alcalde por hablar más de la cuenta cuando se sube a un escenario! Parece mentira que un político que lleva dos décadas gobernando trate siempre de adornar su oratoria con frases tan repetidas que llegan a perder su encanto. O bien que no pegan ni con cola  

Nuestro alcalde, por si ustedes no lo saben, hubiera dado lo que no tiene, a pesar de que jamás se distinguió por meterse la mano en el bolsillo, por ser poeta. De ahí que en sus prédicas siempre recita un retazo del poema dedicado a Ceuta por el poeta López Anglada. Sin darse cuenta de que su insistencia no sólo aburre a la concurrencia sino que convierte el poema en una frase común. Es decir, que lo desencanta. Y no hay derecho... 

A propósito, lo que no pega ni con cola es la frase que ha pronunciado recientemente: "Ceuta es la ciudad del respeto y la concordia". Y nuestro alcalde se ha quedado tan pancho. Menos mal que ha habido quien le ha dicho, con celeridad y acierto, que si las trifulcas que se producen en las sesiones plenarias sirven como ejemplo de comportamiento para los ceutíes. O sea. 

El Madrid defiende pésimamente

Decir que el Madrid es actualmente un equipo al que le han perdido el respeto sus rivales es axioma. Afirmación que es admitida hasta por quienes son forofos recalcitrantes del equipo blanco. Courtois ha encajado 10 goles, que son muchos, a pesar de que ha destacado sobremanera en todos los partidos. Lo cual evidencia que el equipo no defiende bien. Por no decir que lo hace pésimamente. 

Defender es labor que corresponde a todos los futbolistas. Es una trabajo del que nadie puede llamarse andana. Lo que no entiendo es cómo Carlo Ancelotti les permite a sus hombres que se hagan los desentendidos cuanto toca robar balones o presionar a sus rivales para que no campen en el césped por sus respetos. Vamos, como Pedro por su casa... La organización defensiva corresponde organizarla al entrenador. Y por tanto ha de ser ejercitada con disciplina espartana.

Produce grima ver actuar al equipo blanco cuando no está en posesión de la pelota. Cada cual hace la guerra por su cuenta. Los hay que se quedan mirando las musarañas; otros hacen de palomeros; y quienes se dignan defender lo hacen en desventaja y bisbiseando maldades contra quienes no tienen ni un ápice de espíritu de sacrificio. En el Madrid se ha impuesto, según vemos, esa frase tan manida que decían los futbolistas acomodaticios en los tiempos de Maricastaña: "Correr es de cobardes...". 

El técnico del Madrid no es un cualquiera. Estamos hablando de un tipo que ha sido destacado jugador en Italia y entrenador grande desde hace hace ya mucho tiempo. Por lo que no concibo que haya descuidado la organización del sistema defensivo de su equipo. Tampoco creo,  de verdad de la buena, que se le haya ocurrido decirles a sus hombres en un momento de euforia algo parecido a lo que se cuenta que Luis Molowny les decía a los jugadores en su época de entrenador: "Salgan al campo y jueguen como ustedes saben". 

En suma, no defender bien en el fútbol es un problema que conduce casi siempre por la senda de la derrota. Genera desconfianza entre líneas. Y, en un momento determinado, es causa de riñas entre compañeros. Es un mal que cuando arraiga cuesta lo indecible erradicarlo. Así que bien haría Ancelotti en tomar nota de cómo se realiza esa labor en el Atlético de Madrid.

En el Madrid impera el desorden

El orden en un equipo de fútbol lo asume el entrenador. Y los jugadores han de responder a lo exigido por el técnico. Luego está la imaginación de cada futbolista. Aunque ésta se les permite a quienes están capacitados para salirse del guión establecido. En el Madrid actual impera el desorden. La descolocación de los jugadores en el césped es absoluta. Hay dos que no pierden el oremus: Courtois y Benzema. Los demás son como unos aficionados que se reúnen los fines de semana para jugar un partido de solteros contra casados. Y, claro, de semejante desbarajuste se ha aprovechado un Español que ha merecido la victoria. La cual pudo ser más amplia si Darder hubiera marcado el tercer tanto cuando se quedó solo ante Courtois.

El equipo entrenado por Vicente Moreno dominó el centro del campo desde el principio. Con cuatro centrocampistas se impuso al de los blancos, compuesto por Kroos, Modric, Valverde y Kamavinga escorado a la banda izquierda. La situación de éste no era ni chicha ni limoná. Es decir, que ni él sabía su cometido. Lo cual, además de lamentable, va minando la confianza de un futbolista recién llegado y con la edad en la boca. Tampoco sé a lo que juega Valverde: Al uruguayo se le ve porque es alto y además tiene buena prensa. Y, por si fuera poco, Modric y Kroos dan la impresión de que están dando ya las boqueadas como futbolistas de élite.

La superioridad del Español dio su fruto con un gol en el minuto diecisiete. Embarba eludió a Alaba y su centro al primer palo lo remató Raúl de Tomás por una anticipación fallida de Nacho. Cuya debilidad defensiva se va acrecentando cada vez más. Parece mentira que un jugador polivalente y cuya eficacia ha sido patente en los últimos años esté pasando por tan mal trance. Pero el Madrid no se puede permitir el lujo de tener una defensa cuya endeblez es manifiesta. Puesto que Lucas Vázquez tampoco da pie con bola. Lo que repercute en el rendimiento de los centrales. Que no es el que se esperaba de ellos.

El segundo gol del equipo blanquiazul lo obtuvo Aleix Vidal en el (59').  Aprovechando fallos en cadena por la banda que él transitaba. Es decir, por la izquierda de los visitantes. Los cambios realizados por Ancelotti cuando el Español trataba ya de mantener el resultado, sirvió para ver un Madrid que quería pero que no atinaba en sus acciones. Menos mal que, como casi siempre ocurre, surgió Benzema y acortó distancias con un magnífico gol. Quedaba tiempo para empatar... Pero ni el Madrid lo merecía ni su juego dio para lograr siquiera un punto. A partir de ahora, como es natural, Ancelotti tendrá que acertar con una alineación donde jóvenes y veteranos se entiendan bajo un sistema adaptado a las condiciones de todos ellos. 

Canallada

Un partido político es una organización capaz de movilizarse contra uno de los suyos cuando percibe que éste pretende acceder a la presidencia que ostenta quien tiene más clientelismo. El diccionario de María Moliner lo define así: Práctica social y política en la que las personas u organizaciones poderosas recompensan a sus partidarios brindándoles protección y determinados favores. Por consiguiente, como diría Felipe González, cabe repetir una vez más eso de que "por muy sucia que se imagine uno la política, siempre lo es mucho más". 

Javier Guerrero es un médico que lleva muchos años gozando de popularidad en su tierra. Sus conocimientos profesionales van acompañados de un carácter jovial que agrada a cuantas personas tienen la ocasión de tratarlo. En cualquier conversación relacionada con él, lo primero que sale a relucir es su llaneza y, desde luego, la bondad que le permite pararse en la calle con quienes lo aborden para contarle sus dolencias. Me imagino que el señor Guerrero tendrá sus defectos de humano, como cada uno... Aunque yo los desconozco. Tal vez porque, a pesar de que llevo tres décadas en Ceuta, he hablado muy poco con él. 

Ahora bien, a mí me sorprendió muchísimo cuando decidió participar en la política activa. Incluso dije para mí: ¿Qué necesidad tiene este hombre de vivir rodeado de impostores?...  Y vaticiné entre personas prudentes que Javier Guerrero duraría nada y menos en el Gobierno presidido por Juan Vivas. Por razones que conoce quien escribe. Cuando la pandemia le achacaron un problema acerca de las mascarillas y también sobre su vacunación. Y tuvo que darse el piro. Pero siguió soñando con ser algún día presidente del Partido Popular y por tanto candidato a la alcaldía. 

Pero Javier Guerrero cometió el error de airear sus pretensiones. Sin caer en la cuenta de que a partir de ese momento sería ya persona poco agradable para el amo y las amas del cotarro. Lo que nadie esperaba es que semejante situación fuera aprovechada por un sujeto -o sujeta- para difamarlo. Ojalá, por el bien del Partido Popular, que la Policía descubra a quien ha cometido semejante canallada.